Las empresas de seguros han tenido que considerar su gestión de riesgos operacionales en relación a sus estrategias, sus políticas y procedimientos.
La estrategia implica contar con un sistema de gestión de riesgos que deben tomar en cuenta para las operaciones de negocios, las políticas relativas a la gestión de sus riesgos y finalmente los procesos y procedimientos relativos a los productos y servicios que ofrecen. Esto les permitirá identificar, medir, gestionar y monitorear de forma continua los riesgos a los que toda la organización pueda estar expuesta en el presente y a futuro.